jueves, 31 de enero de 2013

45.1. Una nueva cuenta hacia adelante

Hoy cumplo años. No es un cumpleaños cualquiera. No es uno de esos que se van quedando en la rutina  tras el transcurrir de los años. Es el comienzo de una nueva vida, porque la naturaleza, la fortuna (por no pecar de arrogante e implicar a ninguna divinidad), me ha concedido la oportunidad de seguir en este mundo, como siempre sin saber hasta cuando, pero con la firme determinación de aprovecharla de la mejor forma posible. Así que me quedo en los 45, y a partir de aquí punto y seguido... Este será, por tanto, mi 45.1 cumpleaños.

Comienzo esta nueva etapa con un sabor agridulce, porque ayer dejamos aquí, en Aquitania, el cuerpo inerte de una gran y muy querida persona y hoy volvemos a España con los ojos doloridos de tanto llorar, pero con la energía para seguir adelante, porque no puede ser de otro modo.

sábado, 26 de enero de 2013

Un adios a una gran persona

Me acabo de enterar de la noticia. Es dificil de creer. Nunca acabamos de estar preparados para algo así. Primero crees que no es verdad. Te niegas a aceptar lo que tus oídos escuchan perfectamente, quizás de una forma tan clara porque todo tu ser, toda tu atención, está puesta en ese auricular que ahora, cada vez más debilmente, apenas logras mantener entre tus manos, pegado a tu oído. Y sigue insistente, empecinado en convencerte de algo que no quieres aceptar, que no es justo, que no...  Muchas veces te lo han contado, lo has visto en la televisión o cine, o lo has leído en cualquier relato. Siembre es igual. Primero te niegas a aceptar una realidad tan dolorosa, después te embarga una tristeza muy profunda que da inicio al duelo necesario por la pérdida. Pero así es y ha sido desde el principio de los tiempos. Lo que resulta difícil de creer es cuando es algo tan repentino, tan inesperado. Cuando no hay nada que te haya preparado para el desenlace. 

Yo no tuve la fortuna de conocerle bien, pero si lo suficientemente como para ser consciente de su calidad humana, y lo que no pude conocer directamente se me ha revelado indirectamente pero con una claridad infinita a través de los que le conocieron bien.

Yo le recuerdo con una sonrisa, de esas abiertas, francas, sinceras. Siempre con una expresión de seguridad y de optimismo. Y así quiero recordarle.

Era una gran persona y deja un gran legado. Un gran legado entre lo que se encuentra una gran cantidad de amigos que estoy convencido que honrarán su memoria y unos hijos que no dejarán de enorgullecerle allí desde donde se encuentre.

¡Un fuerte abrazo, querido David Ducos!

martes, 15 de enero de 2013

Un millón de gracias!

He sido consciente de que mi adorable familia ha estado en todo momento al pié del cañón. Que mi maravillosa compañera también. Que mis amigos más cercanos se han preocupado por mi estado, que incluso compañeros, camaradas, nuevos y viejos se han preocupado por mi estado y por mi evolución.

Sin embargo mientras yo permanecía ausente, centrado en mi lucha personal contra el dolor, he ignorado un gran número de situaciones, preocupaciones, llantos, emociones, pensamientos e incluso oraciones, que se dirigían a mi procedentes de múltiples fuentes. De tanto dolor y preocupación no he sido en absoluto consciente hasta que he recuperado mi consciencia y una mínima energía.

Sólo puedo decir dos cosas de todo corazón: Perdón por haceros sufrir y gracias por estar ahí, por mantenerme vivo y sano en vuestro pensamiento, porque estoy convencido que toda esa energía que habéis focalizado en vuestros pensamientos es responsable directa de que siga aquí.

A todos vosotros, familia, amigos, compañeros, camaradas... e incluso enemigos: ¡Un millón de gracias!