Aprende a apreciar lo que tienes antes de que el tiempo te enseñe a apreciar lo que tuviste.
miércoles, 25 de agosto de 2010
Vive
Cambia, crece, construye. Guía tus actos, tus impulsos, tus deseos.
Siente. Siente profundamente.
Sueña. Que no se muera la ilusión.
Padece. Lo justo y necesario para apreciar el contraste.
Llora. De emoción, de alegría.
Salta. Transmite esa energía de nuevo al universo. No te pertenece. Libérala para que alimente a otros.
Rie. Atrae hacia ti la alegría.
Toca. Deja que tus dedos acaricien su piel.
Ama. Como hubieras deseado que te amasen o como realmente lo han hecho.
Comparte. Todo lo tuyo. Hasta lo más íntimo. Tu riqueza está en lo que das, no en lo que retienes.
Escucha. Con toda tu atención y toda la intensidad, hasta el murmullo del más absoluto silencio.
Perdona. Y no olvides olvidar.
Observa. Como si cada detalle fuera nuevo para ti.
Lucha. Que no te pueda el dolor.
Vive. Profundamente. Como si no existiera mañana.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario